jueves, 12 de febrero de 2015

EL ANIMO DEL CAPITAN JUAN

Obviamente, desde el Departamento de Informaciones de la Policía, le pusieron la mesa servida. Puentes de plata. Micrófonos. Rueda de prensa. Emisión a través de las cadenas nacionales a través de ZP1, emisora del Comando de Transmisiones ZPM, servicio radioeléctrico del Ministerio del Interior, Radio Nacional y ZP5 Radio Encarnación.
La rueda de prensa se instaló en el salón de actos de la Asociación de Prensa del Paraguay y el evento fue organizado por la SubSecretaría de Informaciones y Cultura de la Presidencia de la República. El trabajo incluyó la transcripción de la versión taquigráfica en 19 páginas, en varias copias, fechada el 10 de marzo de 1960. Una de esas copias, quedó bien guardada en el Ministerio del Interior.
¿Aparte de lo expuesto en esa rueda de prensa, qué llevó realmente al capitán Juan Parra, ex combatiente de la guerra del Chaco, ex combatiente de la revolución de 1947, a romper en forma tan tajante con el movimiento 14 de Mayo que el mismo ayudó a conformar como dirigente del partido Febrerista?
La presentación inicia el maestro de ceremonias, quien en casi tres páginas, no ahorra elogios a la brillante foja de servicios del militar Parra -información obrante en el Estado Mayor-, que detalla que distintas oportunidades se destacó en las misiones conferídales por la exactitud de sus partes y de su espíritu y su moral.
Parte de las respuestas de la decisión del capitán, están en su extensa exposición. La misma, según sus expresiones, fue realizada en forma voluntaria y especialmente a su pedido. Pero el militar, necesitó ampliar él también su foja de servicios y actuaciones, como participante del alzamiento de Concepción y su participación protagónica en la revolución de 1947, como conductor de la batalla en la que fueron derrotados los revolucionarios a las afueras de Asunción. Contó que luego, debió llevar sus tropas al Brasil, y que una vez allí, las desmovilizó. Se exilió en Argentina. Partició en diversas conspiraciones para tumbar el gobierno, todas fallidas, incluso la conspiración de mayo de 1956 que la consideró la más seria y vasta. Y a la que culpó de su desastre, a un intento desesperado de los liberales de copar el movimiento.
Contó que participó en la creación de la Vanguardia Febrerista en Buenos Aires, y a la que describió como un movimiento 100% nacionalista sin la más mínima influencia extraña a la nacionalidad paraguaya. Y que ellos, a partir de 1959, tomaron contacto con liberales, especialmente alonianos, y que juntos, forjaron el 14 de Mayo.
Luego detalla, que a partir del 5 de diciembre de 1959, toma cuerpo su preocupación por el relajamiento de la disciplina, y la aparición de planes que no eran los originales, ni los pactados por el superior comando. Elementos sin experiencia especialmente liberales, comenzaron a copar y tomar acciones por sí solos, como las del 12 de diciembre, producto de la irresponsabilidad. Este hecho lo llevó a abandonar la zona y trasladarse a Buenos Aires. Desde Vanguardia Febrerista le dieron nueva orden de trasladarse a Resistencia, para reaorganizar el movimiento. La orden la cumplió el 13 de diciembre. Allí dijo que presenció dos actos más, que sólo sirvieron para ponerlos en evidencia sin ningún resultado práctico. Uno, el intento de toma del vapor Bahía Negra, y el segundo, la inexperta manipulación del parque, que produjo una explosión accidental, desatando allanamientos por parte de autoridades argentinas.
Otro de los hechos que influyeron en su ánimo, para que éste se transformara en animadversión, fue una llamada operación “Catalina”, que poduciría muchos daños materiales, y que él militar consideraba un inaceptable crímen por venir de mentes externas al movimiento.
La muerte de Monzón, el allanamiento de su domicilio en Buenos Aires, lo llevaron a precipitar su salida del 14 de Mayo y el abandono de Vanguardia, hecho que había comunicado a algunos de sus compañeros. No encontró otra alternativa que ingresar al Paraguay para declarar todo esto ante las autoridades que lo han recibido con júbilo, y ayudado a concretar esta rueda de prensa.
Al final de la exposición. Rueda de preguntas. El periodista consulta si cómo técnico, cuáles son las posibilidades de éxito de las operaciones rebeldes.
El militar contestó que en las fronteras todos subestiman la fuerza del gobierno y la posible eficacia de las operaciones que posiblemente se aproximan. A su modo de ver, no ve ningún resultado, por la constitución misma de los cuadros. Así como por la falta de información que tienen, y la precisa información que el Ministerio del Interior tiene de todas las fuerzas y puntos de ingreso. Como el mismo capitán pudo corroborar.
Al concluir su exposición, dejó en claro, por tanto grabado, que sintió que se estaba sacando de encima, la mochila más pesada que le había tocado llevar a cuestas en su vida.
(Off de record: Aunque no quedó grabado, es posible, que a partir de ese momento, el militar, haya cargado sobre sus espaldas y de por vida, otra mochila, y de las que no se van con ruedas de prensa).

Federico Tatter

Febrero de 2015. Asunción, Paraguay.

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