domingo, 1 de enero de 2017

EL SOSPECHOSO NEXO ENTRE SAN CAYETANO Y TUNQUELEN

Por Federico Tatter @Fedetatter ‪#‎relatosbreves‬ ‪#‎eranegra‬ ‪#‎paraguay‬ ‪#‎UNAnotecalles‬ ‪#‎Paraguaynotecalles‬ ‪#‎Memorianotecalles‬

Pobre del presbítero italiano, devenido en San Cayetano en 1671. Santo conocido como el Patrono del pan y del trabajo. Hasta sus seguidores cayeron bajo las redes de seguimiento político y religioso del eficaz pyragüé “Guión Rojo” de la ANR, Francisco Ortíz Tellez.
El tal Téllez, cónsul paraguayo en la ciudad de Posadas, Argentina, entre 1971 y 1989, se dio a sí mismo el mote minimizante y ridículo de ser “sólo un gorrión de la Operación Cóndor”, mientras dedicó todos sus años de servicio al dictador, persiguiendo vida y obra de todos los paraguayos exiliados que por su zona de influencia pasaron.
No lo hizo sólo es cierto. Fue parte de una maquinaria rudimentaria pero eficaz. Fue un necesario tornillo del rupestre nacionalsocialismo criollo paraguayo. Fue correo ultrasecreto entre Stroessner y el Servicio de Inteligencia del Ejército Argentino, conocido bajo las siglas del SIE, de quienes recibió precisos dossieres casi semanales con científica información obtenida. Realizó un trabajo coordinado muy especial con el delegado de gobierno del departamento de Itapúa, el comisario de Investigaciones, Francisco Bogado Farrugio. Cada uno en cada orilla del caudaloso río Paraná, para “cazar” paraguayos y paraguayas contrarios a la dictadura stronista.
 En carta secreta al ministro del Interior Montanaro, “el gorrión Téllez”, fechada el 25 de marzo de 1980 puso el acento en el “subversivo” Faustino Centurión, miembro del Mopoco y el Acuerdo Nacional. Pero al estirar de ese hilo, logró obtener importantes datos de otros subversivos, que según su roedor olfato, estaban enmascarados y escurridos bajo el manto de la Acción Católica.
Este “gorrión” con negra alma de pyragüé, conocía el paño de la grey santularia a la perfección, pues en su juventud fue seminarista, hasta poco tiempo antes de integrar hasta capitanear una banda de parapoliciales que asoló la ciudad de Barrero Grande, hoy Eusebio Ayala, y sus alrededores en los años sesentas.
Por sus desmanes, a partir de 1967, hasta Monseñor Rolón, inauguró con él, la “correctiva” excomunión temporal. Rolón no lo atajó, aunque Stroessner lo premió.
Textualmente, Francisco Ortíz Téllez informó: “...El activista del mendezfleitismo en esta ciudad (Posadas, Argentina), barrio “San Cayetano”, Chacra 209, Julio González Paiva, realiza una activa campaña entre los conciudadanos que conforma la mesa obrera de esta Provincia, distribuyendo entre ellos panfletos y folletos como el que acompaña la presente a fin de adoctrinar y reclutar. Colabora con él en esta campaña los ciudadanos paraguayos … Roberto López, de 42 años, liberal, viaja frecuentemente a San Juan-í (Encarnación), profesión contador, trabaja en la firma “Tunquelen” de esta ciudad, cuyo propietario es el ingeniero Miguel Noffall (h), quien también dispone de una bodega en la ciudad de San Lorenzo (Paraguay) … Atilio Ruiz, paraguayo, de 50 años, liberal, cajero de la firma “Tunquelen”, oriundo de Santa Elena, a donde viaja periódicamente, su madre está radicada en dicha ciudad. Los tres en el barrio “San Cayetano” conforman la “Acción Católica del Templo San Cayetano” y es otro de los medios de “adoctrinamiento”.
Bajo la pomposa firma, llena de bucles y rulos del patético pyragüé, sobre el sello del “Consulado del Paraguay, Posadas, Argentina”, es posible leer el destinatario. “A Vuestra Excelencia, el señor Ministro del Interior, doctor Sabino Augusto Montanaro, Ministerio del Interior”. “El gorrión del terrorismo de estado” gustaba ponerle firma aparatosa a todos sus “trabajos”, como para “pavonearse”, por estar garantidos por la precisa información ilegal y secreta de la inteligencia militar argentina.

Federico Tatter.
1ro. de enero de 2017.
Asunción, Paraguay.

Material corregido por Eugenia de Amoriza.