miércoles, 1 de abril de 2015

MALA PERSONA EN TABLADA NUEVA

El Sub Comisario Carmelo Gaona de la Seccional Quinta de Tablada Nueva, decidió encarar profesionalmente su ascenso político y policial. En pleno 1960, adoptó el “pyragüereato” como el camino más rápido y seguro. Su actuación no habría de desentonar con el ambiente de la época. Donde la ley era de todos contra todos. Finalmente, todos hacían lo mismo. Había que soplar a todos. Y quien no soplare, con seguridad, sería soplado, tarde o temprano.
Así, logró juntar a sus adversarios más cercanos en una página y media, y saltando jerarquías, envió contundente alegato de informante al irreversible Coronel de Estado Mayor don Ramón Duarte Vera, para que se vean los lerdos.
En la misiva de la delación, fechada el 8 de junio de 1960, Gaona denunció que un tal Pablo Gómez, vecino de la jurisdicción de Tablada Nueva, se dedicó a recorrer las casas de los colorados contreras, como los hermanos Liseras, Acosta Báez y Aguilera, despotricando contra las autoridades, pero especialmente contra su persona, el propio Sub Comisario Gaona, al que definieron como “una persona mala”, que no merecía estar al frente de esa dependencia policial.
Escribió Gaona, que el tal Gómez, se dirigió en forma igualmente denigrante, hacia todos los miembros de la Seccional 2, diciendo que ninguno servía para nada, poniendo a unos en contra de otros, y sólo con la intención de destruir la armonía que debe reinar en una conglomeración política.
Continuó Gaona, que el denunciado, operó en forma idéntica con todas las demás aglomeraciones, políticas, culturales y deportivas, creando una situación de anarquía. Y como prueba adjunta la lista de los actuales miembros del “Club de Bollibol Constitución”(sic). Donde el denunciado figura como presidente honorario, y donde todos los miembros son liberales activistas, que él mismo, los revolucionó, en contra del anterior presidente del Club, don Salustiano Vázquez, correligionario colorado y honorable de la jurisdicción de Tablada Nueva.
Acelera Gaona, y amplía, denunciando ya a todos los señalados más arriba, de que en realidad, todos actúan con el solo propósito de crear descontento entre las personas, y sembrar zozobras dentro de la población.
Por todo lo relatado, continúa Gaona, él mismo le ha llamado al orden al sujeto Gómez, advirtiéndole severamente por su comportamiento. Y cuenta que el citado sujeto, le respondió que nadie le apura, pues él cuenta con el apoyo del Jefe de Policía y el ministro del Interior, que además es su padrino. Y que el propio Gómez le dijo, que postularía su candidatura para la próxima reunión partidaria de la Seccional 2, y con el respaldo de las personas citadas.
Gaona, concluyó su pieza argumental a Duarte Vera, de que pone a conocimiento de esa Superioridad, que la Sub Comisaría Quinta, a su cargo, iba a controlar de cerca a la referida persona (Pablo Gómez), y no le permitiría que continúe con sus andanzas.
Así, se soplaron unos a otros en los años sesentas. Así continuó, la lógica autoritaria hecha cultura. Se policializó la política, y se partidizó la policía. Donde no se encontraron enemigos, se crearon.✔

Federico Tatter.
31 de marzo de 2015. Asunción, Paraguay.

ARTURO DE BARRERO GRANDE

El maestro rural, Arturo López, oriundo de Barrero Grande (localidad rebautizada como Eusebio Ayala), fue el organizador de la toma de su propio pueblo. Lo decidió al anochecer del 24 de mayo de 1960, al frente de la llamada Columna Mariscal López, del Frente Unido de Liberación Nacional, FULNA.
La muerte violenta de Arturo, se produjo en un cruce de la localidad de Ypacaraí, el 17 de agosto de 1970, diez años después de los sucesos de Barrero Grande. La traición, ese día llevó el nombre de Blas Cristaldo, su entregador.
Dicen que el comandante guerrillero, enfrentó a tiros al mismísimo cruel y sanguinario ex general Patricio Colmán, hiriéndolo de muerte, antes de caer bajo las balas de sus lugartenientes. Este hecho, lo transformó en la leyenda de las resistencias armadas de las Cordilleras.
Hay otras historias acerca de la posible muerte de Colmán, que podrían haber involucrado a uno de sus hijos, tras oscura reyerta familiar. En una historia, a veces, merodean varias leyendas.
Decían que Arturo, era muy escurridizo; decían que tenía muchos amigos; decían que tenía muchos escondites y senderos; decían que tenía muchos disfraces y trucos.
Sobre él y toda la columna a su mando, el régimen estableció un especial cerco dirigido por el Ministerio del Interior, a cargo de Edgar Linneo Ynsfrán, la Dirección Nacional de Asuntos Técnicos (DNAT), más conocido como “La Técnica”, a cargo de Antonio Campos Alum, Felipe Nery Saldívar; la Delegación de Gobierno de Cordillera a cargo de Juan Agustín Cartasso, Sergio Enrique Dacak, y una gendarmería volante que integraron varios comisarios como José Ignacio Irrazábal, Juan Arturo Hellman, Egidio Doroteo Calderini, entre otros, junto a una vasta red de policías confidenciales, alcaldes rurales y milicianos de seccionales. Hasta aquí el contexto.
Vamos a los documentos internos del Ministerio del Interior, “La Técnica”, y sus servicios de agentes confidenciales.
El 27 de mayo de 1960, tres días después de la toma simbólica y momentánea de Barrero Grande, desde “La Técnica” y dirigido al Ministerio del Interior, redactaron dos breves informes.
El primero, registra lo dicho por el señor Francisco Solano López, oriundo de Barrero Grande y testigo de los hechos. El mismo asevera, que se estaría sospechando formalmente por el señor Arturo López, como uno de los dirigentes del atraco, siendo el mismo Arturo, también oriundo de Barrero Grande y de reconocida filiación comunista.
Finaliza el informe diciendo que, un grupo de desconocidos irrumpieron en una reunión de la Liga Cordillerana de Deportes (había muchos efectivos policiales en la misma), y una vez allí preguntaron por el señor Alfonso González García. Al identificarse González García, éste fue llevado hasta su domicilio, para que entregara al grupo, un radio transmisor que era propiedad de la finada Eloisa de Alonso, según dicen. Esto ocurrió alrededor de las 21 horas, cuando el grupo se retiró hacia la compañía Caundy, haciendo vivas a la revolución y gritando abajo Stroessner.
El segundo de los informes, indica que el infiltrado “Martínez”, recibió órdenes del FULNA, de escoltar a una mujer cuyo seudónimo era “Susana”, para viajar desde Asunción a Piribebuy llevando dos cajones. El informante al no conocer el contenido, dedujo sería material bélico (Tal vez, no tenía conocimiento de la existencia de un grupo de jóvenes llamados “gorriones” que llevaban material de propaganda en forma clandestina).
El infiltrado “Martínez” indica que la organización del FULNA en las Cordilleras es más fuerte en las compañías Tapé-Guazú, Itá Morotí y Capilla Cué. Y que la organización estaba a cargo de Marciano Villagra, conocido comunista, hermano del Capitán de Reserva Américo Villagra. Lo secunda en sus trabajos, el profesor Arturo López, oriundo de Barrero Grande, y que los acontecimientos allí ocurridos el 24 de mayo, fueron organizados por las personas citadas precedentemente. Fin de los informes.
El docente Arturo López, la leyenda de la resistencia de las Cordilleras, fue más conocido con el nombre de Agapito Valiente.✔

Federico Tatter.
30 de marzo de 2015. Asunción, Paraguay.

lunes, 30 de marzo de 2015

LA MOROCHA SILVIA

El 12 de diciembre de 1959, fue el primer intento del ingreso del Movimiento 14 de mayo hacia las serranías del Ybyturuzú desde Argentina. El segundo intento, fue a través de la columna Libertad al mando de Juan José Rotela, a partir del 29 de abril de 1960.
Por otro lado el Fulna, el 24 de mayo de 1960 intentó la toma de Coronel Bogado. Luego, a partir del 12 de junio de 1960, ingresó también, cruzando el Río Paraná y hacia las mismas serranías, la columna Ytororó, al mando del teniente de aviación Adolfo Rubén Avalos Carisimo. Nunca más se supo de ellos.
Los dos más grandes intentos armados contra el régimen stronista, terminaron en una verdadera masacre, pues sólo existieron escaramuzas. Casi todos eran hombres jóvenes, pues había tres mujeres, Antonia Perruchino, Julia Solalinde y Juana Peralta. Casi la totalidad, hechos prisioneros en escasas semanas. De más de 150 personas de ambas columnas, sólo seis sobrevivieron y por poco tiempo a esos hechos. Los demás, fueron todos ejecutados en cautiverio luego de horrendas torturas. Sus cuerpos abandonados a la carroña, o mal enterrados clandestinamente. Este es el contexto.
Veamos el documento. El Ministerio del Interior, contaba con una Dirección de Comunicaciones, y ésta a su vez, con una Sección de Claves y Cifrados. El día 7 de junio de 1960, con la categoría “Oficial-Clave”, y probablemente presentado a las 01:30 am, es enviado desde El Consulado paraguayo de El Dorado, Misiones, Argentina (Consulpar El Dorado), un despacho radiotelegráfico, al Ministerio del Interior (MInterior).
El mismo decía: “Ruégole detener a Silvia Godoy que viaja de Presidente Franco hasta Coronel Oviedo pretexto traer suma de dinero STOP Silvia es morocha, media gorda, y actúa como espía rebelde STOP prosigue en ésta intensos preparativos para enviar nuevos contingentes de refuerzos a Paraguay STOP”.
Inmediatamente, por orden del Ministro del Interior, Edgar Linneo Ynsfrán Doldán, se cursaron mensajes cifrados a las delegaciones de gobierno de Alto Paraná y Caaguazú, así como a la jefatura de Policía de la Capital. No hay registros acerca de la morocha Silvia Godoy.✔

Federico Tatter.
27 de marzo de 2015. Asunción, Paraguay.

AQUINO, EL ADULON OBISPO STRONISTA

El Papa Jesuita Francisco, realizará una visita al Paraguay en el 2015. Para ello, es importante recordar que 40 años atrás, existió una fuerte puja dentro de la cúpula eclesial católica. El apoyo al stronismo y las mieles del poder, versus el antistronismo, y el posible ostracismo con expulsión del país incluida. Varios jesuitas llevaban años expulsados del Paraguay. Caravias, Oliva, Sanmartí, Munárriz, etcétera. Una gran pérdida cultural para el país. Todo orquestado, irónicamente, desde el Ministerio de Educación y Culto.
El control político y religioso fue manejado por Raúl Peña, ministro de Educación y Manfredo Ramírez Russo desde la política de Culto.
Repasemos memoria. El Manfredo Ramírez Russo, como director de Culto instruía al embajador paraguayo en el Vaticano, Juan Livieres Argaña, a través de informes secretos y confidenciales. Esto lo hacía, por la falta de un Cardenal paraguayo que opere sobre las decisiones de Roma. Así como el estado stronista, atacaba a Rolón y Maricevich, apoyaba y daba recursos a sus obispos stronistas, el Monseñor Aquino, era, uno de ellos.
En el informe confidencial 162/77, del 15 de noviembre de 1977, que seguramente obra en los archivos del actual MEC, y que debería estar abierto a todo público, Manfredo el inquisidor, daba cuenta de sus acciones con los obispos obsecuentes del régimen.
Y relata que la Iglesia está preparando con mucha propaganda los festejos relativos a la Virgen de Caacupé, y que por esa razón, como lo hacía en forma periódica, cada quince días, realizó una visita de trabajo, a su hombre en Caacupé, el Monseñor Demetrio Aquino. Especialmente para “coordinar algunos detalles”. Especialmente, “conocer la lista de los oradores designados”, y continuar con la política del estado stronista de acercamiento a una parte de la jerarquía eclesial, que era de interés gubernamental.
Mandredo, informa al embajador en el Vaticano, que Monseñor Demetrio Aquino, tiene excelentes relaciones con el Delegado de Gobierno (hombre del Ministerio del Interior) en el departamento de Cordillera, el doctor César Palacios, del que sabe que tiene una expresa noción de la política en juego, y entre quienes tienen un contacto permanente y muy cercano. Una correcta coordinación.
Para finalizar el parte, y como prueba de lealtad, destaca que el propio Monseñor Aquino, Obispo de Caacupé, ha demostrado su buena voluntad, hace tan sólo tres semanas atrás al participar activamente en el acto de homenaje al propio Ministro de Educación y Culto, profesor Raúl Peña, ofrecido por el magisterio oficialista de la Cordillera. El Ministro Peña, le hizo saber, que la presencia y las dulces palabras de Aquino hacia Peña y al gobierno, le llenaban de gozo y satisfacción. La lealtad, sin adulonería era casi imposible en el stronismo. Es más, lo segundo, era prueba de lo primero. Entre hurras y vivas.✔

Federico Tatter.
26 de marzo de 2015. Asunción, Paraguay

VIGILADOS INDIGENAS EN VISITA SOSPECHOSA A ROMA

El Papa Jesuita Francisco, realizará una visita al Paraguay en el 2015. Para ello, es importante recordar que 40 años atrás, los jesuitas, y por segunda vez en la historia, fueron expulsados del Paraguay. La segunda, por el régimen stronista. Oliva, Caravias, Munárriz, Sanmarti, entre otros fueron echados por una maquinaria represiva que los tildó de peligrosos subversivos ideológicos al servicio del comunismo internacional.
Si bien la orden intentó el retorno de sus religiosos, desde el Vaticano, soplaban en contra. ¿Por qué?
La represión sistemática, fue planificada desde el Ministerio de Educación y Culto, por Raúl Peña y Manfredo Ramírez Russo. Éste último, fue un miembro clave del Grupo de Acción Anticomunista, GAA, capítulo paraguayo de la mayor reunificación nazi, fascista, nacionalista, anticomunista, republicana mundial, la WACL, con sede en Taiwán.
Repasemos la memoria. El inquisidor Manfredo Ramírez Russo instruía constantemente al embajador paraguayo en el Vaticano, Juan Livieres Argaña (A falta de un Cardenal, el hombre del stronismo en Roma), para acabar con los obispos contestatarios, como Ismael Rolón y Aníbal Maricevich, que les producía “urticaria”.
Pero el ajetreo de Manfredo no se circunscribía a los jesuitas solamente. Su labor inquisitorial fue enorme. Seguramente ciclópea. Se habrá sentido en verdad un “cruzado medioeval”, cada vez que se mirara al espejo.
Esta vez eran, los indígenas y la Misión de Amistad. De acuerdo al informe confidencial 118/77, del 12 de setiembre de 1977, que con seguridad seguirían juntando polvo en los anaqueles del Ministerio de Educación (y si no han sido convenientemente destruidos), Manfredo dio instrucciones a Livieres Argaña, para no pierda el rastro de un indígena llamado Alberto Santacruz. Quien era líder de la Asociación de Parcialidades Indígenas (quien había sido criado por sacerdotes oblatos y hablaba varios idiomas muy bien). Este haría un viaje a Ginebra y Roma con el deseo especial de entrevistarse con el Papa Pablo VI. ¿Qué querría un indígena con el Papa?
Manfredo, precavido, pidió y recibió oportunos informes militares y policiales, del expediente de vida del tal Santacruz. A través del Coronel Alberto Samaniego, que tenía a su cargo el Instituto Nacional del Indígena, INDI. El tema indígena, bajo órbita militar.
En el oficio, alerta a Livieres Argaña, que hace pocos meses estuvo en el Paraguay, el profesor Ahrens, conocido por sus temerarias aseveraciones acerca de un “genocidio indígena en el Paraguay”. Como ya el tal Ahrens tuvo un encuentro con el tal Santacruz. No deberían volver a encontrarse en Europa. Sería una mala señal.
En la misma nota, Manfredo aclara a Livieres Argaña, que su ministerio ha recibido y enviado informes confidenciales sobre varios movimientos sospechosos y susceptibles de cercana vigilancia. Como gente vinculada a los Discípulos de Cristo con pretensiones de viajar al exterior. Por ejemplo, Marcelino Zarza, de la Misión de Amistad, está invitado por el Departamento de Estado para visitar EUA. El señor Jorge Valanovsky y la doctora Julia Esther de Fretes Ventre, fueron invitados a Europa por “una cantidad de organizaciones de asistencia social”, como por ejemplo “Pan para el Mundo”. Y como suplente fue nominado un tal Dionisio Borda, que por lo visto, siguió vinculado a la Misión de Amistad, a pesar de la situación surgida con él el pasado año 1976, con el caso OPM.
Para todos ellos, de acuerdo a precisas órdenes del Jefe de Investigaciones, Pastor Coronel, no les serán otorgados pasaportes oficiales, con el argumento, que los mismos son potestad exclusiva para funcionarios de gobierno y personas en misiones oficiales. Y este no era el caso.
Concluye el informe, que la embajada de los EUA había insistido en los pasaportes oficiales para estas personas, al mismísimo Manfredo Ramirez Russo y al el doctor Miguel Angel Bestard (declarado nacionalsocialista), subsecretario de Relaciones Exteriores de la época, para lograr el objetivo.
Mientras tanto, de acuerdo al informe confidencial 162/77, la coordinación de control y seguridad, policial, militar y de inteligencia, sobre los legajos personales de los religiosos extranjeros continuaba cada día vez mejor. Al punto que incluso, desde la dictadura argentina, le solicitaron a Manfredo, informes personales sobre un tal religioso de nombre Juan Oscar Usher, seguramente, por algún tipo de contacto sospechoso, que el mismo pudo haber establecido en Buenos Aires.
Ironías. Juan Oscar Usher, ya era el rector de la Universidad Católica de Asunción, UCA. Jamás importó. Manfredo el inquisidor, ya estaba preparando un informe para la represión argentina. Nada sin controlar. Manfredo el “Torquemada del Paraguay”, en su salsa.✔

Federico Tatter.
25 de marzo de 2015. Asunción, Paraguay