viernes, 24 de octubre de 2008

PARAGUAY: DRAMA SOCIAL E INEXISTENCIA DEL ESTADO


Es una verdad a medias, pero una verdad a voces, el estado paraguayo no existe desde hace tiempo. Sólo sobreviven aparatos de estado al servicio de intereses privados nacionales y extranjeros, legalizados e irregulares, que valga la repetición han privatizado trozos del antiguo estado paraguayo y lo manejan de acuerdo a estrictos códigos mafiosos.

Y este conjunto de intereses mafiosos, muchos de ellos operando a la luz del día y hasta produciendo ostentación de honorabilidad, conviven contradictoriamente respetando menos de 10 por ciento de aquello que le correspondería y está prescrita en una Constitución Nacional y la leyes.

Y es así, porque estos factores, han incrustado dentro de los partidos políticos a sus agentes, que a su vez ha feudalizado cada centímetro de la administración pública central, departamental y municipal.

Grandes negocios se manejan desde el propio parlamento y el verdadero monumento a la destrucción de la institucionalidad al servicio de intereses privados nacionales e internacionales, hoy está centrado en el poder judicial y sus satélites, el ministerio público, el consejo de la magistratura, el jurado de enjuiciamiento de magistrados, el tribunal superior de justicia electoral, desde la corte suprema hasta el último ujier.

LABERINTO DE INTERSES Y RECONSTRUCCION DE LO INEXISTENTE

De allí las enormes y casi insuperables trabas con las que está encontrándose el ex obispo de San Pedro, Presidente Fernando Lugo, quien es proveniente de uno de los departamentos más pobres y desiguales del Paraguay. Lugo, fue un catalizador de múltiples deseos, anhelos, intereses, diversos, y hasta paradójicamente contrapuestos, pero arrimados por la vía de la dialéctica de la lucha por el poder. El resultado final de este primer acto, todos lo conocemos.

Un hombre estructuralmente bueno, hermético en su carácter, por deseo mayoritario de la ciudadanía, es catapultado por el voto popular a un difícil e importante lugar para decidir qué hacer con tanto atraso en no hacer nada, con tanto atraso en hacer mal, con tanto atraso en robar hasta el orgullo de ser paraguayo, por parte de una oligarquía ultraconservadora, violenta, miope e inmensamente ignorante, que dio durante más de 60 años un cheque en blanco al partido colorado para que se engullera todo lo que pudiera y destruyera todo atisbo de ciudadanía sobre la faz de la República, dejando una especie de tierra arrasada, sólo comparable, sin grandes exageraciones, a los desmanes y consecuencias de la inmediata posguerra grande de 1870.

El detalle no menor, es que el ciudadano, depositó en él y sólo en él la confianza para tamaña empresa. Ante el vacío de la política luego de los años de plomo de la dictadura y los años tóxicos de transición.

Y lo terrible es que expresamente, no la hizo extensiva ni por asomo a otros sectores o individuos que acompañaron y acompañan al Obispo hoy Presidente de todos los paraguayos. Ni los que estuvieron con el Obispo ya sea desde el inicio de su aparición pública, los autodenominados "de la primera hora", ni de aquellos que se fueron acoplando en el camino "una mayoría inorgánica", y mucho menos de lo que hasta el día de hoy buscan sumar puntos para intentar ser vistos en actitudes "políticamente correctas", entiéndase, lo suficientemente correctas y afines al pensamiento íntimo del propio Presidente.

Presidente, que dicho sea de paso, hace lo posible para escuchar mucho y emitir la menor cantidad de opiniones posibles, y mucho menos en las fuertes controversias de intereses donde, directamente, el silencio es el que habla.

Este hecho a veces confunde a más de uno, sobre todo si está en la búsqueda de lograr captar la "frecuencia correcta" en el "momento correcto", fijar el dial y no perder la señal en el camino.

En un tiempo y en una función específica de la toma de posiciones y definiciones fuertes, en una estado de anomia, es cierto que el Poder Ejecutivo recibe por tanto en forma permanente fuertes impactos y presiones en el plexo solar, en el medio y de lleno, con el agravante de un escenario regional que de la noche a mañana, cambia de gris a casi negro y sin visos de solución a corto plazo.

Esta es la realidad que nos toca vivir, y es la realidad que le toca administrar como principal responsable al Presidente de la República, la inexistencia del estado como garante de la seguridad de todos los habitantes de la nación. Seguridad entendida en términos de las responsabilidades expresadas taxativamente en la constitución nacional, de garantía de la identidad, de la nacionalidad, del derecho a vivir dignamente en su tierra, de la salud pública, de la educación pública, de la vivienda propia, del empleo digno, de la tierra para labrar, etcétera, que aún siendo imperativos constitucionales, en este estado de cosas actual, no es posible hacer más que amagos de buena voluntad.

Además de hacer intentos de programas parches, con curitas y venditas a cada una de las reivindicaciones legítimas e históricas del pueblo paraguayo. Claro, es difícil pedir paciencia al estómago vacío. Pero es perfectamente factible dejar de pedir sacrificios extras a quienes ya tanto se le ha saqueado y negado. Es la hora del pueblo. Porque el pueblo lo ha querido.

REPRESION FISCAL Y POLICIAL CONTINUA EN ALTO PARANA

Hoy la Coordinadora Departamental de Sin Tierras del Alto Paraná y la Asociación de Agricultores del Alto Paraná (ASAGRAPA) "denunció el violento desalojo de unos 2.000 campesinos sin tierra, provenientes de unas 720 familias, en la ocupación de la localidad de San Isidro, distrito de Los Cedrales en el Alto Paraná. Las tierras ocupadas son parte de las 17.000 hectáreas que posee la empresa alemana IVP y la arrendataria Agrosol, cuyo presidente es el germano Rudolf Handel". La policía por decisión fiscal detuvo a 101 campesinos.

Así también dicha organización denunció "la calumniosa afirmación del Fiscal Troadio Galeano, quien dijo que los campesinos se hallaban armados. El objetivo de esta mentira era provocar una represión aún más dura y criminalizar la lucha justa de los sin tierra, presentándolos ante la sociedad como "delincuentes comunes". En este mismo caso, el mencionado fiscal reconoció tener "infiltrados" dentro de las ocupaciones". Este hecho es particularmente delicado en tanto que en todo conflicto debe existir la garantía de parlamento y conciliación de intereses como principio cardinal, jamás la represión bajo ningún motivo.

A tal punto está llegando la violencia provocada por agentes fiscales, policiales, fogoneados por los terratenientes que la Red Rural del Paraguay debió expresarse en términos enérgicos "Preocupados por el aumento de la tensión entre campesinos sin tierra y propietarios, los unos que solicitan reforma agraria ya! y los otros que se militarice el campo en resguardo de sus propiedades y bienes, nuestras instituciones se ven en la obligación de convocar a las partes involucradas a demostrar las mejores intenciones y sinceridad en la búsqueda de resolver este conflicto que lleva décadas sin encontrar salidas para la disminución de la pobreza, y la cada vez mayor concentración de tierra en manos de unos pocos.

Creemos que el origen los estos problemas que estallan hoy es la falta de implementación de una reforma agraria de acuerdo con los lineamientos establecidos en la Constitución Nacional y en el Estatuto Agrario. La omisión, durante décadas, de esta obligación del Estado ha convertido al Paraguay en el país con más alta concentración de la propiedad de la tierra rural. El 2% de las explotaciones rurales controla el 83% de la superficie. Es obvio que sólo una firme medida gubernamental que sea producto de la aplicación de la ley y resultado del diálogo intersectorial, podrá modificar esta situación, donde la peor parte se llevan las familias campesinas empobrecidas. Ellas ponen las postergaciones, las frustraciones, las marginaciones y las muertes", dice un fragmento del comunicado.

SEQUIA CHAQUEÑA ES POBREZA Y ABANDONO ESTRUCTURAL

En el mismo sentido, una colaboración de la agencia Noticias Aliadas coincide que "La sequía del Chaco paraguayo, en la frontera con Argentina y Bolivia, no es ni nueva ni azarosa. El deterioro en el medio ambiente produce resultados calamitosos en las diferentes áreas de este característico escenario del Paraguay. La destrucción de los bosques y de los ecosistemas, acompañada por la contaminación del aire y de los recursos hídricos, genera profundas modificaciones en el terreno y en la naturaleza, que agravan la situación de extrema necesidad de los pueblos del Chaco, especialmente los indígenas". Siempre de acuerdo a Noticias Aliadas "...el entramado social del Chaco demuestra la coexistencia de pobreza extrema y necesidades básicas insatisfechas en el sector mayoritario de los habitantes, y una minoría favorecida, dueña de grandes latifundios y fortunas producidas a costa de la agroexportación, la producción ganadera y la explotación de las clases empobrecidas ... Además el acceso al agua de tajamares y aljibes que está en territorios privados y cercados —en los que se prioriza el consumo de ganado vacuno en detrimento del humano— es una ardua tarea. Los cargamentos de ayuda, con víveres y agua para consumo familiar, deben sortear varios obstáculos puesto que no sólo las telecomunicaciones son obsoletas sino que los caminos están altamente desmejorados, lo cual dificulta el traslado ... “Si no cambia el sistema de producción en la región esto va empeorar ... Si se quiere mantener un sistema de comercialización orientado al mercado, se debe generar técnicas adecuadas al Chaco, con modelos adaptados a la región como podrían ser el uso de tajamares y aljibes, métodos ecológicos que pueden ser utilizados tanto en la agricultura como en la ganadería...." opina la Agencia.

MESA DE AGUA PARA EL CHACO, UNA ALTERNATIVA MÁS

Como una buena iniciativa multisectorial, "la Secretaria de Emergencia Nacional (SEN), a convocado a instituciones públicas, organizaciones civiles, gobernaciones chaqueñas, cooperación extranjera, a conformar una Mesa para Gestión del Agua en el Chaco Paraguayo. Este espacio, que se inscribe en el Plan de Protección Civil Chaco "Oikoteve Ñanderehe", según sus coordinadores, "se propone discutir las oportunidades para la gestión del agua y la solución estructural de los problemas de provisión de agua sana y segura, a las comunidades indígenas del Chaco". Estas experiencias, se suman y corrigen otras iniciativas en una suerte de prueba error hasta encontrar la voluntad de acción única del estado paraguayo en intentar paliar emergencias a la vez que trabajar en cómo resolver problemas de larga data y donde las políticas deben ser de carácter estratégico y permanente, antes que episódicas y temporarias.

VULNERABILIDAD ENDEMICA DE LA POBLACION

Esta situación, es especialmente grave en el Chaco Paraguayo, reflejo del verdadero drama macro social del Paraguay, y reflejo de que cada zona de todo el territorio nacional, cuando es atacado por diversas razones, sean de origen natural o social, nos muestra la extrema vulnerabilidad de las redes sociales de contención, la inexistencia del estado como protector, la sobrevivencia de aparatos de estado que han generado y empeorado cada situación en un proceso lento de degradación que lleva décadas. Lo podemos ver en el tornado de Concepción, en las zonas inundables cercanas a las represas hidroeléctricas, ante cada crecida cíclica de los ríos en época de lluvias en los bañados norte y sur de Asunción, así como lo hemos visto y lo seguimos viendo en el caso de los 400 muertos de la tragedia del supermercado Ycua Bolaños.

LUGO DEBERA DEFINIRSE MAS POR EL FACTOR SOCIAL

Y como el Parlamento nacional se anula a sí mismo como eje de la representación de la diversidad nacional, y como la vicepresidencia no da señales de articulador entre el poder ejecutivo y el parlamento ratoneándose con los mismos sueños de todos sus antecesores desde la creación de la misma casi como un "virus vicepresidencial", y como el poder judicial vive en una autista crisis de autosubsistencia y autoreproducción como la "antiinstitución" por excelencia, no existe en el Paraguay otra institución, otra voluntad, por más débil que sea, por más bueyes mañeros que haya heredado, que la Presidencia de la República y el propio Presidente Lugo para armar, rearmar, y vuelta a armar las veces que sean necesarias, los bloques de mayorías representativas y bien representadas para mantener la institucionalidad, para crear más institucionalidad, y para efectivamente bajar al terreno de las acciones, de las políticas públicas concretas, la ansiada justicia social en el Paraguay, tantas veces postergada y traicionada, tantas veces ensangrentada y sobre ella misma, aún tibia negociada.

1 comentario:

  1. Querido amigo Tatter, es tan difícil desandar años de ignominia. Nosotro lo sabemos bien. Es más, creo que es la experiencia de todos nuestros pueblos.
    Ciro

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